Existen rumores que desmiente el viento
pende de mi cuerpo el péndulo de carne
el que marca tus horas al ritmo de tu vientre
donde el silencio no se cansa y solo existen
los ojos náufragos ahogados de si mismos
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario